La forma en que las estaciones miden la lluvia ha sido diseñada para obtener una precisión óptima. La precipitación cae en el recolector, cuya área superficial está dentro del rango recomendado por la Organización Meteorológica Mundial (World Meteorological Organization, 2021). El ángulo del recolector ha sido diseñado para evitar que las gotas de lluvia rebote fuera del receptáculo.

Las mediciones de la lluvia pueden verse afectadas por varios factores, incluido el viento, la evaporación, las salpicaduras y el agua que se adhiere al equipo de medición. Para abordar estas discrepancias y obtener una medición más precisa de la lluvia real, se emplean diversos algoritmos y técnicas.

El sistema de medición del pluviómetro es un sistema de cubo basculante. Una vez filtrada, el agua llega al cubo. Una acumulación pequeña pero suficiente de agua activa el basculamiento del cubo, incrementando el contador de lluvia.

También se ha pensado cuidadosamente en la forma del recolector para que la medición de la lluvia se vea lo menos afectada posible por los factores ambientales. Dentro del recolector hay un filtro para proteger el sistema de medición de elementos externos y permitir que se limpie de manera rápida y sencilla.

Estamos mejorando la precisión de los datos de nuestra estación a través de un algoritmo especializado diseñado para abordar problemas como el agua que permanece en la superficie de recolección y la evaporación. Este algoritmo garantiza que incluso las cantidades mínimas de lluvia se registren con precisión.

ORGANIZACIÓN METEOROLÓGICA MUNDIAL (WMO), 2021. Guía de Instrumentos y Métodos de ObservaciónISBN 978-92-63-10008-5